Animada por los niños y niñas de los 1º Básicos, en el patio de la Sección Inicial se celebró la Asunción de la Virgen. Ella se hizo presente para recibir las flores que cada curso preparó para ella. Humildad, obediencia, generosidad, esperanza y respeto fueron los valores que rescataron de nuestra Buena Madre y los plasmaron en estos presentes.

Luego, Jesús y los ángeles la llevaron hasta el cielo. Desde allí, todos cuidan a la familia marista. Esta fiesta es muy importante para nuestra comunidad, pues San Marcelino Champagnat estaba convencido de que su congregación de Hermanos es la obra de Dios y de María, por eso repetía constantemente: “Todo a Jesús por María, todo a María para Jesús”.

En representación de los Hermanos Maristas, el Hno. Feliciano Ortega recibió todo el cariño de los niños y niñas, a través de unas tarjetas gigantes que los cursos prepararon con dibujos y recortes alusivos a nuestra Buena Madre.

La celebración terminó con las voces de todos los niños y niñas, que cantaron a María, Jesús y a los ángeles que los saludaban desde el cielo.